Hace un par de semanas, el día 16 de octubre,
el grupo de PRUP 1 recibió a dos invitadas. Ellas vinieron a hablar con el
grupo sobre las necesidades de otros y
sobre los retos que tiene la educación incluyente. En un inicio nos
hablaron sobre lo que la convivencia incluyente
debe de ser y como debemos referirnos a las personas con ciertas
discapacidades. Después de una breve introducción realizamos dos actividades
para ponernos en los zapatos de personas con discapacidad visual y discapacidad
motora.
Meli realizando la primer actividad |
La primera actividad
consistió en suponer que nosotros no teníamos brazos y realizar un
dibujo con acuarelas en una hoja; podíamos hacerlo con la boca o con los pies.
Cada quien hacia el dibujo con la parte del cuerpo con la que se sintiera mas cómodo,
unos lo hicieron con el pie y la mayoría con la boca. Al principio creímos que sería sencillo
realizarlo, pero al pasar el tiempo nos dimos cuenta que no era así; nos
comenzó a doler el cuello, la espalda, los pies, se nos movía la hoja, se nos
caía el agua, etc. Fue ahí donde comenzamos a darnos cuenta la importancia que
tienen nuestros brazos y manos en la realización de acciones en la vida diaria. Pudimos ver como damos por hecho que tenemos
partes del cuerpo para muchas cosas y el reto q ue es tener alguna discapacidad
motora.
Pau y Nestor llegando al salón |
La segunda actividad
consistió en que sintiéramos lo que era tener una discapacidad visual. Nos
proporcionaron un antifaz y un palo de madera (que representaba un bastón) y
tuvimos que caminar desde la entrada de la biblioteca hasta nuestro salón con
el antifaz puesto. La verdad esta actividad nos pareció muy padre, pero a la
vez muy frustrante porque no podíamos ver nada y sentíamos que en algún momento
nos estrellaríamos contra algo o que nos tropezaríamos. El recorrido se nos
hizo eterno y nos dimos cuenta que al no poder ver nuestros pasos eran más
pequeños y que caminábamos con mucho más cuidado. Consideramos que fue una
buena forma de lograr que nos sensibilizáramos con las personas que tienen esta
discapacidad.
Para finalizar la sesión
hicimos un cierre sobre las actividades y nos dieron un tipo panfleto sobre
como tratar a las personas con discapacidades. Aprendimos que es muy importante
se incluyente y siempre considerar a las personas con discapacidades como
personas capaces y con diferentes habilidades. Fue una experiencia de sensibilización
muy interesante y entretenida.
Por: Ariana Bañuelos , María José Celis y Melissa Funes
si recuerdo ese dia fue una experiencia muy padre, y como ustedes mencionan es una forma de considerar alas personas con capacidades diferentes como personas capaces y con diferentes habilidades.
ResponderEliminarles quedo muy bien compañeras..
haciendo memoria de esa clase, recuerdo que algo que me llamo la atención fue el como muchas veces utilizamos palabras para referirnos a alguna discapacidad que son despectivas o erroneas, y no nos damos cuenta.
ResponderEliminarPor ejemplo mencionaron que la forma correcta de nombrar a una persona con dificultad para ver es ciega no invidente, porque al nombrarlo invidente, nos convierte en videntes a las personas que si podemos ver. Un vidente es una persona capaz de predecir el futuro, creo que no podamos generalizar una habilidad de este tipo.
Esta taller me gustó mucho porque no sólo se quedó en la teoría y con una simple explicación acerca de las personas que tienen capacidades diferentes, si no que, llegó a ser algo mas significativo porque lo vivimos y pudimos (a mi precepción) apreciar lo que tenemos y ver de diferente manera a las personas con capacidades diferentes.
ResponderEliminarEste taller fue una oportunidad para valora cada miembro de mi cuerpo,y el preguntarme yo ¿qué hago con lo que Dios me regalo?. Pero sobretodo me ayudó a comprender a una sobrina de 14 años que perdión su brazo izquierdo en un accidente automovilístico cuando viajaba en la camioneta de su papá junto con otras primas. Cuentan que estaban comiendo papitas y tomando refrescos y mientras ella volteaba hacia atras para pedir más, se descuidó del volante y en menos de 2 segundos estaban fuera dela carretera y la camioneta chocó contra una gren piedra y se volcaron. Enel itento de queresalise su brazo quedó debajo de la camioneta que con el vuelo que llevaba destrozó su brazo. Ella ahora está en terápia y con apoyo de toda la familia.
ResponderEliminareste taller fue una oportunidad para valorar cada miembro de mi cuerpo y preguntarme ¿qué es lo que hago con lo que Dios me ha regalado para ser feliz y ponerlo al servicio delos demás?, pero no sólo eso sino que me ayudó para comprender y ayudar a una sobrina de 14 años que perdió su brazo izquierdo en un accidente automovilístico cuando manejaba la camioneta de su papá. El accidente sucedió cuando viajaba acompañada de sus primas quienes estabn comiendo paitas y ella volteo para pedirles que le dieran y fue en ese momento que decuido el volante y en menos de 5 segundos estabn fuera de la carretera, la camioneta chocó con una gran piedra y se volcaron en el instant ella trato de salir pero sólo pudo sacar el brazo y con la velocidad que viajaba la camioneta se lo destrozó. A hora ella está recibiendo terápias y aopyo de toda la familia.
ResponderEliminarQué experiencia tan fuerte la de tu sobrina, María Elena. ¿Cómo está y cómo va la familia? Lorelí
EliminarEste taller me pareció la mejor actividad del semestre. fue una gran oportunidad para ponernos en el zapato de las personas que tiene alguna discapacidad. a mi me dio la oportunidad de valorar todas la capacidades que tengo y así.
ResponderEliminarMaría Renee Molina Camou.
ResponderEliminarA mi lo que más me gustó acerca de esta actividad, es que no fue una actividad normal, fue una actividad diferente que nos ayudó a darnos cuenta cómo es que unas personas tienen problemas ya sea de vista o tienen alguna discapacidad. Podemos oír muchas veces acerca de casos o de personas que nos cuentan cómo se sienten, pero es muy diferente que te lo cuenten a que tu lo vivas, por eso es que me gustó.
Este taller me gusto bastante, el percatarte que algunos de tus miembros, sentidos, no funcionen o no esten presentes en tu vida. Este taller me puso a vivir por un momento lo que siente una persona con discapacidad al tratar de desplazarse, de realizar alguna actividad cotidiana.
ResponderEliminarme parecio un gran taller, ya que te pones en los zapatos de los demas. y a veces uno piensa que es facil, pero estando ahi nos damos cuenta que no. nos desesperamos y eso que solo fueron 2 horas. imaginate ellos aprenden hacer las cosas por si mismos.
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